RAFAEL CORTIJO Y SU BONCHE ( PA LOS CASERIOS )


TRACK

01. Suki Suki
02. Pa' Los Caserios
03. Mujer Me Voy
04. Tan Solo Dios
05. Par de Loros
06. No Le Des La Firma
07. Pa' Guayama
08. San Juan 450
09. Apati Aguagua
10. Policia Policia

CONOSCAMOS   ALGO  DE  RAFAEL CORTIJO

Rafael Cortijo Verdejo es una de las figuras más innovadoras e importantes para la historiografía musical puertorriquena. Su ingenio marcó un hito en pleno desarrollo de la bomba y la plena, sirviendo de punta de lanza para el posterior surgimiento del sonido de la salsa.
Cortijo nació el 11 de diciembre de 1928, en la calle Colón de la parada 21 de Santurce. Aprendió a dar toques de tambor en rumbas callejeras, sin realizar estudios en música. Aun así, fue un sabio de la tumbadora y desarrolló un estilo único con destrezas nunca antes escuchadas entre los músicos de la época. Innovó en la creación de su combo, introduciendo dos trompetas, dos saxofones, piano y timbales en la ejecución de bombas y plenas, pero reteniendo su sabor tradicional y su base rítmica.
"Fue un científico del ritmo y un hombre lleno de ideas. Sus iniciativas (musicales) lo hicieron grande", opina Sammy Ayala, su compadre y uno de sus primeros cantantes. La proyección de su trabajo transportó nuestros ritmos nacionales fuera de los arrabales para situarlos en los mejores escenarios dentro y fuera de Puerto Rico. Sus arreglos musicales -en gran parte trabajados por Quito Vélez- no eran muy elaborados, en cambio su sonoridad devolvió a la percusión el predominio que había perdido por la fuerza que habían adquirido agrupaciones estilizadas, como la Orquesta Siboney y la de Rafael Munoz



Rafael Cortijo constituyó la primera banda integrada por negros -rompiendo la barrera del racismo- y logró trabajar en los más prestigiosos hoteles de San Juan. Como líder de grupo, Cortijo marcó una nueva etapa de progreso para sus músicos -hasta entonces tratados con indiferencia por su extracción social y racial- e insistió en subirles el salario. Antes, cuenta Sammy Ayala, sólo se pagaba $25 por seis noches por considerarse "músicos de la calle y sin escuela". Con Cortijo llegaron a cobrar hasta $12 por baile. 



El segundo disco fue "Baila con Cortijo y su Combo" (sello Seeco) que incluyó la melodía "Lo dejé llorando", que fue la primera composición de Sammy Ayala. Luego le siguieron "Cortijo en Nueva York", "Fiesta Boricua" y "Quítate de la vía, Perico", producciones que cosecharon éxitos como "El bombón de Elena", "Maquinolandera", "El negrito bembón", "Con la punta del pie", "El Chivo" y "Saoco", entre otros.
En 1960, Roy Rosario abandonó el conjunto en Nueva York y Rafael Cortijo integró a Roberto Roena, quien pasó a ser su primer bongocero. El 21 de marzo de 1962 el binomio se quiebra tras producirse el arresto de Ismael Rivera, cuando regresaba con el grupo de una gira musical por Venezuela y Panamá. El Sonero Mayor cumplió cuatro anos de prisión.